Antibacteriana: impide el desarrollo de bacterias responsables del mal olor corporal.
Astringente: ayuda a cerrar poros y controlar el exceso de sudor.
Cicatrizante: favorece la regeneración de la piel en casos de cortes menores o irritaciones.
Hipoalergénica: ideal para pieles sensibles o alérgicas a desodorantes convencionales.
Desodorante natural: basta con humedecer la piedra y aplicarla sobre la piel limpia para disfrutar de una protección duradera y sin fragancias artificiales.
Post-afeitado o post-depilación: calma la piel, reduce la irritación y previene infecciones.
Tratamiento para picaduras o granitos: alivia la comezón, desinflama y favorece la curación.
Cuidado de los pies: ayuda a controlar el mal olor y la sudoración excesiva.